La organización de la boda implica muchos pequeños y grandes detalles, especialmente en lo que se refiere al banquete y los invitados. Confeccionar una lista no es tarea sencilla y, desde luego, puede generar algunos roces. Especialmente si hay un presupuesto limitado o si los papás de la novia son quienes pagan el banquete. Para quedar bien con todo el mundo y que nadie se sienta incómodo es importante:
1. Definir el tipo de celebración
¿Banquete o cocktail con poquitos invitados? Además del presupuesto con el que pueden contar, es indispensable saber qué es lo que realmente quieren tu novio y tú, independientemente de los deseos de los padres de ambos.
2. ¿Quién paga?
Aunque cada vez más parejas de novios pagan su boda, aún hay padres que continúan haciéndose cargo de estos gastos. Si los papás de la novia son quienes financian la fiesta y requieren ampliar la lista, es posible que los novios tengan que negociar un poco, para llegar a un acuerdo. Por otro lado, si los padres de él desean invitar a más personas de las previstas, es correcto que también aporten una parte de los gastos. No obstante, hay que insistir que la boda es de los novios.
3. Hagan una lista general
Este es el primer paso y debe incluir primero a los familiares más cercanos y a los amigos y, en segundo término, a los parientes lejanos y a los compromisos. Sin embargo, es importante no olvidar que, a partir de los 25 años, los solteros también deben ser invitados con un acompañante, ya que incluso será más fácil distribuir las mesas. Normalmente en sus listas tendrán más invitados de los previstos, por lo que tendrán que eliminar a aquellos con quienes tengan menor relación. Aunque también deben calcular que un porcentaje pequeño (entre un 5 y 10% de los invitados), no asistirá a su boda.
4. Niños
Definitivamente las bodas son un evento familiar, pero también una celebración de adultos. Lo más recomendable es invitar solo a los sobrinos de ambos contrayentes o a los pajecitos y acomodarlos en una mesa específica para ellos.
5. Confirmar
Utilizar un servicio de confirmación puede ser una idea fantástica para tener muy claro quiénes asistirán a la boda. Se puede hacer vía telefónica o incluso, hay páginas web que ofrecen este servicio de forma gratuita. Los novios no deben hacer estas llamadas. Si no desean contratar un servicio profesional, uno o dos amigos cercanos, muy organizados y con tiempo, son la opción ideal para realizar esta tarea. Los invitados no se sentirán incómodos ni presionados ante la llamada de una persona neutral.